Marco Marco -nombre artístico de Marco Morante- tomó el escenario en el festival de música Dreamland, centrado en la comunidad LGTB y enmarcado en la Semana de la Moda de Nueva York, y rompió el último récord Guinness de asistencia a una pasarela, de 1.012 personas, registrado en Rusia en 2018.
Dreamland prometía superar ese número con un cartel musical encabezado por los pinchadiscos Diplo, Blond:ish y LP Giobbi, y lo logró, si bien la cifra de unas 2.000 personas, recogida por el diario New York Post, fue más menor respecto de las 3.000 entradas vendidas y los 5.000 asistentes que se proponía.
Lo cierto es que en la cita de moda de Nueva York hay un gran abanico de posibilidades para pasar la jornada y la lluvia que obligó a retrasar el evento pudo disuadir amuchos, además de la programación del desfile al final del festival, tras horas de baile.
Marco Marco, que es un defensor de la comunidad LGBT y la cultura "drag", volvía a una pasarela después de cinco años y lo hizo por todo lo alto, con un espectáculo extravagante, descarado y sexy, tanto por sus creaciones como por los modelos, que se contonearon y bailaron sin complejos en medio de aplausos.
En el medio centenar de conjuntos que presentó hubo monos ajustados de látex, "bodis" que revelaban el trasero, vestidos multicolor con volúmenes exagerados, prendas para lucir escueta ropa interior y piezas dignas de Broadway con motivos de marcianos o cráteres, pero también sudaderas y ropa urbana.
En el caso de las modelos "drag queens", los complementos fueron taconazos, pelucas con tocados de plumas y elaborados maquillajes, que acapararon vítores y "flashes" del público.
Tras el desfile, las pantallas que lucieron el logo del diseñador pasaron a anunciar "Juntos hemos roto un récord hoy", y en los minutos finales, hubo una celebración con pelotas gigantes de colores que se lanzaron los supervivientes de unas cinco horas de "techno" mezclado con éxitos pop de divas como Madonna.
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