El cuerpo militar informó en un comunicado de que el llamado Bloque de Seguridad, que integra agentes de las Fuerzas Armadas y de la Policía, confirmó que se ha logrado "recuperar el control del centro de privación de libertad Esmeraldas", la capital de la provincia homónima del noroeste del país y fronteriza con Colombia.
En esa misma operación, gracias a la mediación de las iglesias católica y evangélica, se ha logrado la liberación de 9 agentes de seguridad penitenciaria y 2 servidores administrativos, agregó la fuente.
Indicó que también este sábado el accionar de "grupos tácticos especiales, equipos y medios logísticos, permitió recuperar el control del centro de privación de libertad de Tungurahua", una provincia del centro andino del país y cuya capital es la ciudad de Ambato.
En esa operación se logró la liberación de 13 agentes de seguridad penitenciaria, quienes han sido "trasladados al hospital municipal de Ambato para su respectiva valoración", precisó la fuente.
"Fuerzas Armadas y Policía Nacional trabajan juntos contra el terrorismo para garantizar la seguridad de los más de 18 millones de ecuatorianos", remarcó el Comando Conjunto en su texto.
La agitación en las cárceles ecuatorianas registradas se suscitó desde principios de esta semana, justo cuando el Gobierno del presidente Daniel Noboa se disponía a poner en marcha un plan para recuperar el control de las prisiones, muchas de ellas dominadas internamente por grupos delincuenciales, cuyas rivalidades han dejado más de 450 presos asesinados desde 2020 en una serie de masacres carcelarias.
Esa violencia también se ha trasladado a las calles hasta hacer de Ecuador uno de los países más violentos del mundo con 45 homicidios intencionales por cada 100.000 habitantes en 2023.
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